El misterio de la Trinidad y el bautismo de Jesús

El misterio de la Santísima Trinidad, es el más profundo, porque nos dice como es la vida íntima de Dios. Los cristianos lo conocemos porque nos lo ha revelado Jesús. Creemos en un solo Dios y tres personas distintas.

Unos de los relatos del Nuevo Testamento en el que se nos muestra este misterio es el bautismo de Jesús.

Goya es uno de los muchos artistas que han representado este momento. 

A Jesús lo bautizó Juan Bautista, en el río Jordán, cuando tenía 30 años.

Éste no es el sacramento del bautismo, que nos quita el pecado original, nos convierte en hijos de Dios y miembros de la Iglesia.

Este bautismo que Juan administraba era penitencial, en él, los que se bautizaban se reconocían pecadores y mostraban que querían cambiar de vida. Jesús no lo necesitaba, era Dios y no tenía pecado.

-¿Por qué se bautiza entonces?

Porque quiere ser contado entre los pecadores, hacerse uno con nosotros, salvarnos muriendo en la Cruz.

De esta manera acepta la misión que le da Dios Padre, podía redimirnos porque era verdadero hombre y verdadero Dios, el Hijo, la segunda persona de la Santísima Trinidad.

-¿Qué representa la paloma del cuadro?

Representa al Espíritu Santo, la tercera persona de la Santísima Trinidad. Se ha visto en la manifestación del  Espíritu Santo en forma de paloma un signo de paz y reconciliación, ofrecido por Dios a la humanidad en Cristo.

-¿Cómo se manifiesta el Padre, la primera persona de la Santísima Trinidad?

Nada más salir del agua apareció la paloma y una voz de los cielos que decía "Tú eres mi Hijo, el amado, en ti me he complacido", estas palabras del Padre significan que Jesús es el Mesías tanto tiempo esperado por el pueblo de Israel, verdadero Dios y verdadero hombre.